Pensar en lo que supone hoy día Internet para un ciudadano implica hacer reflexiones en múltiples ámbitos. Y para enmarcarlas me parece preciso recordar que la ONU declaró el acceso a Internet como un derecho humano en 2011 . Si consideramos que ni siquiera el 50% de la población mundial está conectada, la primera cuestión a debatir tendría que ver con la igualdad de oportunidades: la brecha digital es probablemente la principal causa de desventaja para niños y jóvenes a la hora de enriquecer su formación y preparar su futura inserción laboral. A pesar de que informes recientes apuntan a un aumento de la conectividad digital en España, la realidad que constatamos en los centros educativos nos muestra que sigue habiendo no pocas familias con mala o nula conexión a Internet y que la administración debería asumir la provisión de las infraestructuras necesarias para estrechar dicha brecha. Cuando esta circunstancia se da en una coyuntura económica como la actual en la que el aum